El 16 de abril, Domingo de la Divina Misericordia, la Hermandad de la Soledad peregrinó hasta Carmona donde pudo lucrarse de la indulgencia Plenaria del Año Jubilar que se está celebrando en torno a su muy venerada Patrona Canónica, la Santísima Virgen de Gracia, en el LXXV aniversario de la fundación de su hermandad.
A la llegada a la ciudad, la primera parada fue en la Iglesia del Divino Salvador donde está establecida la Venerable Orden Tercera de los Siervos de María, allí se realizó una ofrenda floral ante su titular, Nuestra Señora de los Dolores y se procedió a rezar una oración. A los Siervos de Carmona se le ha hecho entrega de una reproducción de un grabado de nuestra Patrona, recibiendo de aquellos una reproducción de la medalla original que conserva aquella Fraternidad, de la canonización de Santa Juliana Falconeri y San Peregrino Laziosi así como otra medalla con la imagen de la Virgen de Gracia y los siete fundadores servitas en el reverso, también hicieron entrega de su adhesión a la Coronación Canónica de la Virgen de la Soledad.
En la Iglesia del Salvador también recibió a la Hermandad de la Soledad una representación de la Hermandad de la Virgen de Gracia y seguidamente se puso en camino hasta la Iglesia Prioral de Santa María de la Asunción donde recibe culto la Patrona de Carmona que en este año Jubilar preside el Altar Mayor en su templete procesional. A las plantas de la Virgen, unas de las principales devociones de nuestra Archidiócesis, se celebró la Santa Misa y se le hizo entrega de una ofrenda floral, así como una reproducción del grabado a la Hermandad de la Virgen de Gracia.
Tras la Misa, se visitó la Casa-Hermandad de la Virgen de Gracia donde permanece una interesante exposición que hace un recorrido por su historia devocional, contando con la magnífica guía de Fernando J. de la Maza, Prior de la V. O. Seglar, quien acompaño en todas las visitas al grupo de peregrinos, ilustrándolo con sus interesantes explicaciones. Tras visitar la exposición se acudió también al Convento de Madre de Dios, de las religiosas dominicas y al Convento de Santa Clara, de franciscanas clarisas, en donde se pudieron admirar las valiosas joyas que atesoran.
Aprovechamos estas líneas para agradecer públicamente a la Hermandad de la Virgen de Gracia y a la V.O.T. de los Siervos de María, especialmente a su prior, el magnífico trato recibido, haciendo posible que se viviera una grata jornada en torno a la santísima Virgen dolorosa en su advocación de la Soledad, que sea siempre fuente de gracia como escuchamos ayer en Carmona.
En la Iglesia del Salvador también recibió a la Hermandad de la Soledad una representación de la Hermandad de la Virgen de Gracia y seguidamente se puso en camino hasta la Iglesia Prioral de Santa María de la Asunción donde recibe culto la Patrona de Carmona que en este año Jubilar preside el Altar Mayor en su templete procesional. A las plantas de la Virgen, unas de las principales devociones de nuestra Archidiócesis, se celebró la Santa Misa y se le hizo entrega de una ofrenda floral, así como una reproducción del grabado a la Hermandad de la Virgen de Gracia.
Tras la Misa, se visitó la Casa-Hermandad de la Virgen de Gracia donde permanece una interesante exposición que hace un recorrido por su historia devocional, contando con la magnífica guía de Fernando J. de la Maza, Prior de la V. O. Seglar, quien acompaño en todas las visitas al grupo de peregrinos, ilustrándolo con sus interesantes explicaciones. Tras visitar la exposición se acudió también al Convento de Madre de Dios, de las religiosas dominicas y al Convento de Santa Clara, de franciscanas clarisas, en donde se pudieron admirar las valiosas joyas que atesoran.
Aprovechamos estas líneas para agradecer públicamente a la Hermandad de la Virgen de Gracia y a la V.O.T. de los Siervos de María, especialmente a su prior, el magnífico trato recibido, haciendo posible que se viviera una grata jornada en torno a la santísima Virgen dolorosa en su advocación de la Soledad, que sea siempre fuente de gracia como escuchamos ayer en Carmona.
