Agradecemos a todos los hermanos y devotos de la Santísima Virgen su asistencia y participación en el solemne septenario anual, especialmente a los que iban a participar en la Estación de Penitencia del Viernes Santo vistiendo el hábito de nuestra Cofradía, así como a las hermanas que encarnaron a las Virtudes Teologales y a la Santa Mujer Verónica, al muñidor y a los hermanos acólitos.Del mismo modo queremos trasmitir nuestro agradecimiento a nuestro Párroco y Director Espiritual D. Manuel Martínez Valdivieso, a todas las hermandades de nuestro pueblo, a los diversos grupos parroquiales, a la Corporación Municipal del Ayuntamiento de Cantillana y autoridades que pacientemente aguardaron en el Santuario la decisión de la Junta de Gobierno. Al Ilmo. Sr. D. Rafael del Campo y Fernández de Tejada, Conde de Almansa que en representación de la Orden Pontificia del Santo Sepulcro de Jerusalén participaría en la Procesión.
Agradecemos al coro de nuestra Hermandad su participación en los cultos del Septenario, en la Función Principal del Viernes de Dolores y la Función del Domingo de Resurrección. También a las cuadrillas de hermanos costaleros y al equipo de capataces.
Finalmente queremos agradecer a todo el pueblo de Cantillana su ejemplar y multitudinaria participación en todos los cultos, y sobre todo por su compresión y apoyo tras la dolorosa decisión de no realizar Estación de Penitencia este año.
De nuevo Cantillana puso de manifiesto su respeto y su devoción hacia nuestra Madre, la Santísima Virgen de la Soledad, en la secular tradición de visitarla de forma multitudinaria durante la mañana del Viernes Santo, haciendo de este día uno de los más grandes del calendario cantillanero.
Que el Santísimo Cristo Yacente y Nuestra Bendita Madre de la Soledad, Patrona de esta Villa, nos protejan, bendigan y nos ayuden a vivir cristianamente la alegría de la Pascua.
