
Como en años anteriores, nuestra hermandad ha continuado durante este año inmersa en la conclusión de las nuevas dependencias y restauración de las sacristías. Durante estos últimos meses se ha llevado a cabo la última fase de restauración y recomposición de las pinturas murales el S. XVIII, correspondiente a la escalera de acceso al camarín, que como las anteriores fases han sido realizadas desinteresadamente por un grupo de hermanos especialistas en la materia. Concluida también la instalación de las vitrinas, se ha procedido a la decoración y finalización de las salas. Para ello de ha restaurado una artística vitrina- expositor realizada en madera de roble que custodiaba la hermandad, al igual que la vitrina donde se exponen los varales del palio. Cabe destacar la adquisición de una valiosa lámpara de araña en cristal tallado de ocho brazos de principios del siglo XX para la iluminación de la sacristía, donada por un hermano. Igualmente ha sido sufragada por un hermano la compra de un conjunto de mesa, seis sillas y dos sillones en madera de nogal español tallado y asientos en cuero repujado, para las nuevas dependencias.